La gran palabra con «H»… sí, hipnosis. La hipnosis tiene casi una connotación mágica y ha sido retratada en películas y en la hipnosis teatral como lo que no es.
Primero, tenga en cuenta que en la hipnosis escénica, los voluntarios tienen cumplimiento, presión de los compañeros y otros factores que trabajan a favor de que los voluntarios actúen de manera «tonta».
En realidad, todas hemos sido hipnotizados! Sí, ¿alguna vez has conducido del punto A al punto B, llegado de repente y sin siquiera recordar cómo llegaste allí debido a una canción o debido a que tu mente estaba ocupada en algún tema intenso? ¿Alguna vez alguien te ha gritado enojado: “¿No escuchaste que había alguien en la puerta?” o “¿Te he estado llamando y por qué no contestaste?”. ¿Quizás porque estabas fascinado con una película, una canción o un libro? Entonces, por supuesto, has estado en trance.
La hipnosis es solo un estado alterado de conciencia que, en entornos clínicos, se usa de maneras muy específicas y con propósitos muy específicos. Para fines clínicos, la mayoría de las veces todo lo que se necesita es un trance más ligero que el que ha experimentado al conducir, etc. Siempre estás al tanto de lo que sucede y nunca harás nada que vaya en contra de tu voluntad o tus valores.
La hipnosis se puede utilizar para ayudar a alguien a relajarse y afrontar mejor la ansiedad. Parte de la experiencia es ayudar al individuo a aprender la autohipnosis para poder usarla cuando sea necesario. La hipnosis también puede ser muy útil cuando se trata de traumas. Los traumas son eventos cargados de emociones que necesitan ser procesados en psicoterapia para lograr su resolución. Pero, a veces, procesar recuerdos traumáticos del pasado puede ser muy desafiante. Aquí es donde entra la hipnosis. La hipnosis también sirve como una herramienta disociativa y facilita el procesamiento de estas experiencias difíciles al hacer que la experiencia se sienta más distante.
La hipnosis también se puede utilizar para proporcionar sugerencias deseadas para ayudar a un individuo a alcanzar sus objetivos (por ejemplo, dejar de fumar, visualizar una victoria, etc.). Como parte de este proceso, se utilizan diferentes técnicas para ayudarlo a interiorizar algunas de estas sugerencias. Sin embargo, no hay magia. Alcanzar cualquier objetivo requiere dedicación, persistencia y, con esto, ¡sí, las sugerencias ayudan!
Como cualquier otra herramienta clínica, pregúntele a su psicólogo capacitado sobre la hipnosis y si es algo que puede beneficiarlo en el tratamiento de un problema o en el logro de una meta.