¿Cuánto debo pagar por la psicoterapia?

Siempre que pensamos en comprar cualquier bien o servicio, no solo preguntamos por el producto o servicio. Pero también, nos preguntamos: ¿Cuánto? ¿Cual es el precio? Tiene sentido hacerlo.

Hay tres tipos de compras. Uno es cuando simplemente necesitamos comprarlo cuando es una necesidad. Por ejemplo, hoy en día no tener un teléfono móvil no es una opción. En este caso, valoramos los beneficios positivos que aporta el producto (en este caso, facilidad de uso, múltiples funcionalidades, estética, etc.). Además, comparamos diferentes modelos o marcas en cuanto a prestaciones. Además, comparamos precios.

El otro tipo de compra es cuando no es una necesidad sino deseable. Por ejemplo, algunos podrían argumentar que comprar una prenda adicional no es realmente necesario. Pero, ya sea por impulso o simplemente para darnos un capricho, lo compramos. Por cierto, muchas veces, estas compras impulsivas suponen, de forma individual o agrupada, mucho dinero. El precio, en este caso, está considerado pero pesa menos que la opción anterior.

El tercer tipo está relacionado con la apariencia, la moda, las tendencias y la apariencia. Por ejemplo, someterse a un tratamiento de Botox (por lo general, cuesta alrededor de $ 1200 por tratamiento y se realiza de 3 a 4 veces al año). No hay duda de que verse bien es importante, puede ayudarnos a sentirnos mejor con nosotros mismos. En este caso, el precio es más un concepto de «¿puedo pagarlo?» o “¿cómo puedo ahorrar para poder conseguirlo?”.

Entonces, ¿dónde cae un tratamiento de psicoterapia? ¿Cómo colocamos un valor (precio vs. beneficios)?

Una forma simple, aunque no completamente completa, de evaluar el valor de la psicoterapia es simplemente pensar en términos de cuánto cuesta una sesión. Si solo lo miramos de esta manera, podríamos concluir que es demasiado costoso (junto con la inversión de tiempo que requiere). O podríamos buscar el terapeuta o psicólogo “más barato”.

Entonces, ¿cuáles son otros elementos importantes a considerar al evaluar el valor de la psicoterapia? En primer lugar, la razón por la que buscamos psicoterapia suele ser para crecer o para reducir/eliminar emociones o pensamientos negativos que nos pesan mucho (¡muchas veces es una combinación de crecimiento y superación de emociones/pensamientos negativos!).

La pregunta es ¿cómo monetizamos los beneficios de la psicoterapia?

¿Crecimiento y eliminación del dolor emocional? No existe una forma directa de medir ninguno de estos dos claros beneficios de manera directa, objetiva y cuantificable. Es como, ¿cuánto pagaríamos por deshacernos del dolor físico o de un fuerte dolor de muelas? Es una especie de «no tiene precio». Del mismo modo, crecer como persona o eliminar el dolor emocional no tiene precio.

Sin embargo, consideremos las recompensas asociadas con el crecimiento y/o la eliminación de la angustia mental revisando un par de ejemplos de la vida real. Como aclaración: los nombres y algunos detalles de los siguientes casos se han cambiado para proteger la confidencialidad (la confidencialidad está garantizada como parte del proceso de psicoterapia).

Caso 1:

Jane tiene 40 años, es una exitosa contadora con su propia práctica. Durante años, Jane ha luchado contra una combinación de ansiedad y baja autoestima. En el tratamiento, abordamos esos problemas mientras identificamos experiencias específicas y creencias propias negativas o poco saludables que estaban causando estos problemas (como nota al margen, en psicoterapia, guío, analizo, sugiero, recomiendo, apoyo, etc. pero no puedo). t decirle a los clientes qué hacer. Además, nos reunimos generalmente una vez a la semana durante una hora. Entonces, el cliente se atribuye el mérito de ir por su cuenta durante el resto de la semana, enfrentar los desafíos y, con coraje, tomar decisiones positivas. cambios). Durante años, Jane ha luchado contra una combinación de ansiedad y baja autoestima. Esto se tradujo en no llevar el “dolor” de la ansiedad de forma tan extrema. Además, a medida que Jane se hizo más segura de sí misma, proyectó esta energía. Pudo atraer clientes nuevos y más grandes mientras cobraba un precio más alto por sus servicios. En un momento, Jane dijo: “Me he dado cuenta, sin ser arrogante, que brindo un gran servicio profesional. Realmente creo esto ahora. ¡Mis servicios merecen tener un precio superior!”. ¿Cómo monetizar estos resultados?

Caso 2:

Peter tiene 50 años y es muy brillante y con un gran corazón. Sin embargo, Peter fue abusado de diferentes formas a lo largo de su vida. Involucró abuso físico y verbal. También incluía la explotación sexual. El efecto acumulativo de estos incidentes abusivos claramente abrió heridas emocionales. Específicamente, Peter tenía un trastorno de estrés postraumático (PTSD) grave. En pocas palabras, el PTSD es muy debilitante. Contribuye a tener pensamientos o imágenes intrusivas sobre incidentes abusivos pasados, la persona se esfuerza por evitar a cualquier persona o situación que pueda desencadenar recuerdos, y existe hipervigilancia y desconfianza. Asimismo, la persona experimenta pesadillas que interfieren con el sueño y el descanso. Todo esto conduce a un dolor emocional y mental extremo. Utilizando la TCC (Terapia Cognitiva Conductual) junto con otras técnicas (p. ej., EMDR), con el tiempo, Peter pudo procesar estos traumas. Cuando se trata con éxito, los recuerdos siguen ahí, pero el dolor y el miedo asociados con ellos desaparecen o disminuyen significativamente. Por supuesto, la vida de Peter ha cambiado de manera significativa. Ya no se “esconde”, ahora está ansioso por salir y ser parte de la vida. ¡Peter expresó recientemente sentirse libre, liberado y vivo! ¿Qué precio le pondrías a esto? ¡Probablemente, no tiene precio!

Como reflexión final, vale la pena tratar con su potencial (crecimiento) o eliminar el dolor (emocional y mental). Es importante que confíes no en la opción más barata sino en el profesional que realmente te ayudará en tu viaje.

Te invito a invertir en ti mismo y en hacer cambios a un nivel profundo que te ayuden a alcanzar tu máximo potencial liberado de dolores innecesarios. Lograr esto proporciona recompensas significativas y duraderas. ¡Está a solo una llamada de distancia!